Académicos dicen que en el país se puede invertir a costos razonables; recomiendan apoyo a pequeñas empresas proveedoras de Pemex.

A los ojos de países europeos, los cambios estructurales concretados en México le han dado al país una buena perspectiva de desarrollo, por lo que, sumado a los precios "razonables" para invertir, hay mucho interés de varias empresas por trasladar sus negocios.

Académicos de la Escuela de Negocios de Rennes, Francia, coincidieron en que ante el aumento en los costos de producción de China, muchas firmas del viejo continente estudian la posibilidad de desplazar sus fábricas a México, dado que es una nación que se verá beneficiada por el despunte que, se prevé, tendrá Estados Unidos.

"Hay buenas perspectivas para México, es un país donde se puede invertir a precios razonables y desplazar fábricas puede ser interesante para muchas empresas europeas", dijo Thomas Johnsen, profesor de la maestría en cadenas de suministro y logística de la institución.

En cuanto a los cambios estructurales, apuntaron, el cambio estructural de México que más eco ha tenido entre especialistas y empresarios es la reforma energética.

Ramzi Hammami, director del Centro de Investigación de Cadenas de Suministros de la Escuela de Negocios de Rennes, resaltó que el éxito esta reforma dependerá de qué tan bien se desarrollen las cadenas de valor; es decir, las pequeñas empresas que son proveedoras de Petróleos Mexicanos.

"Las grandes empresas necesitan de las pequeñas para el funcionamiento correcto. Será clave la cadena de valor, porque las pequeñas compañías aportan mucho al resultado final", apuntó el especialista de institución especializada en negocios internacionales.

Cuestionado en el sentido de que las firmas europeas solo se acercan a México y a otros países latinoamericanos para reducir sus costos de producción, Hammami aceptó que eso sucedía hace unos años, pero la visión ha cambiado y ahora no se busca un país para producir barato, sino para ganar más mercados.

"Ahora todo es más global, el tiempo es dinero. Al instalarse en otros países las empresas no solo piensan en fabricar el producto y regresarlo, sino también en colocarlo ahí mismo", apuntó.

Y es que además de los múltiples tratados de libre comercio que sostiene México (12, actualmente, incluyendo uno con la Unión Europea) una ventaja que se ha visto recientemente en términos de manufactura es el llamado fenómeno nearshore. En este sentido, firmas de varios países buscan aprovechar la ventaja de la mano de obra mexicana en precio y calidad contra la de China.

Para Hammami, las empresas han comprendido que volverse sustentables no es un problema, sino un beneficio a largo plazo que les ayudará a ahorrar recursos y aumentar utilidades.

Por ello, el académico aseguró que a más tardar en dos o tres años todas las compañías del mundo tendrán entre sus planes una estrategia de sustentabilidad, aunque reconoció que hay firmas que no se incorporarán de forma fácil, por ejemplo, las chinas y estadunidenses, ello pese a ser las que más contaminan.

"Antes los costos eran altos y se veía en los productos, pero ahora se han encontrado métodos, el mundo ha evolucionado e inclusive se han mejorado los costos. Ya no hay pretextos, antes era claro, pero ahora hay beneficios al volverse sustentable", señaló.

Según Johnsen, los gobiernos de cada país son claves para ayudar a disminuir el daño que algunas firmas hacen al medio ambiente y es su deber aumentar e imponer multas categóricas para las que superan las emisiones máximas de carbono.

Europeas en México

Las empresas europeas ven en México un refugio para inversiones en los sectores automotor, energético, infraestructura, telecomunicaciones y consumo, entre otros.

De acuerdo con Transactional Track Record, en el último año las compañías europeas fueron las que más adquisiciones realizaron en América Latina, con 25; seguidas de Estados Unidos, 21, y Asia, con dos.

Entre las europeas que operan en el país sobresalen las suizas Nestlé, Roche y Novartis; las alemanas Adidas, Siemens, Bayer, Boehringer y Henkel; las españolas BBVA Bancomer, Zara, Santander y Repsol Exploración; la belga AB-InBev  y las francesas L'Oréal, Danone y Colliers International.

Es de subrayar que el Índice de Confianza de Inversión Extranjera Directa en el Mundo 2014, realizado por la consultora de negocios AT Kearney, reveló que en 2013, México captó un máximo histórico de 38 mil 286 millones de dólares, para ubicarse en la posición número 12 entre los países más atractivos para la inversión foránea.

A esa suma se le atribuye en mayor medida la adquisición de Grupo Modelo por parte de la firma belga AB-InBev, misma que representó un desembolso de 20 mil 100 millones al concluir la operación en junio de 2013.

Por otra parte, datos de la Secretaría de Economía indican que hasta agosto de 2014 la relación comercial entre México y la Unión Europea, mediante el Tratado de Libre Comercio vigente desde 2000, generó exportaciones por un valor de 14 mil 18.6 millones de dólares e importaciones por 29 mil 667.3 millones de dólares.

Desde 2000, la inversión desde la Unión Europea a México suma  casi 130 mil millones de dólares.

De la región, integrada por 27 países, México registró la relación más importante en materia de importaciones con España, las cuales registraron un valor de 4 mil 469.9 millones de dólares en ese periodo; mientras que el país con el cual se reportó el mayor número de operaciones fue Alemania, con 9 mil 126.6 millones de dólares.

España ocupa el primer lugar en inversión extranjera directa hacia México, incluso por encima de Estados Unidos y Canadá, al destinar más de 6 mil 836 millones de dólares en el último año, según datos de ProMéxico.  

 

Milenio - http://www.milenio.com/negocios/Firmas-europeas-ven-atractivo-Mexico_0_452954723.html



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